Convengamos que por las posiciones de ambos equipos en la tabla, y por las realidades que atraviesan cada uno de ellos, el resultado que se dio en el Garré era el esperado por propios y extraños.
Claro, son dos equipos, son 90 minutos, es fútbol. Y se sabe que cualquier cosa puede pasar.
Pero, la naturaleza es sabia y se dio lo que debía darse, un triunfo inapelable para el Depo.
Desde el arranque la idea empezó a hacerse carne, cuando a los 3' Collado colocó un hermoso zurdazo en la valla defendida por Sotelo y trajo el primer grito en el Garré.
Y a partir de ahí, todo el desarrollo pasó por el equipo azul dominando, aún sin demostrar un buen juego.
Es que los errores en el fondo de Bancarios hacían sencilla la tarea de los locales, pero al no ser buena la producción del Depo no se veía plasmada esa superioridad en el marcador.
Ocasiones tuvo, y varias. Como también las tuvo Bancarios de dar la sorpresa.
El viento en contra le jugó una mala pasada a Díaz ante un tiro libre de Martín, el dueño de la pelota parada en Bancarios, y tuvo que esforzarse para sacar la pelota al corner. De ahí vino una nueva para la visita en los pies de Ramón Pérez, pero el Gato se repuso y salvó la situación.
Es decir, el Depo dominaba pero también se dejaba estar mucho y en cualquier momento Bancarios podía despertar.
Como a los 23' cuando tras un nuevo tiro libre de Martín, la pelota se estrelló en el travesaño y le dijo no al empate, que de todas maneras hubiera sido injusto.
El Depo siguió en lo suyo y por los 31 se la pierde Maggiorano luego de un tiro libre ejecutado por Arive. Y enseguida, en un intento desde la izquierda, Cardone remata al arco, la pelota cruza delante del arco y Zamorano no puede empujarla.
Se acercaba el final de la primera etapa y bancarios intenta una vez más mediante Barni, aprovechando una confusión en la zaga azul y el remate se va por encima de travesaño.
Y al parecer, en el vestuario local empiezan a acomodarse las cosas. Mendizabal que expresa su disconformidad y el Depo que sale al segundo tiempo con otra actitud.
Y prácticamente, como por arte de magia, desaparece el rival.
Ya a los 3 minutos la pelota cae en el área de Bancarios y luego de una serie de rebotes termina yéndose por la línea de fondo. El Depo quería liquidar rápido el trámite.
Poco tuvo que esperar.
7 minutos, Zamorano que se va por la derecha, centro, cabezazo de Lucas en una semi-palomita y adentro. 2-0 y empezaba a construirse la goleada.
Zamorano empieza a erguirse como la figura del Depo, realizando un gran despliegue físico y desbordando una y otra vez.
Sotelo, un poco inseguro en la primera etapa, comienza a tomar confianza y a sacar pelotas de gol, como un tiro libre del Zamo que se le colaba en el segundo palo.
A los 17' se declara la liquidación del cotejo.
Damián vuelve a escaparse por la izquierda, centro, Lucas que la peina y Bacas que entraba solo la empuja. 3-0.
Ya estaba Bernard en la cancha y el dominio era total.
Bancarios no alcanzaba a pararse ordenadamente pues el aluvión de camisetas azules y blancas era impresionante.
Sotelo seguía ahogando el grito de gol cuando evita que el Tito convierta tras un gran remate.
Debuta en el Depo Matías Collado, y el ataque se hace por momentos intratable.
El nuevo valor del Depo empieza a mostrar una gran habilidad y buen dominio del campo de juego y poco a poco le suma nuevos dolores de cabeza a la visita.
A los 23' Bacas mete un centro, Matías Collado la frena, amaga, se acomoda, remata y su remate se va apenas afuera.
Pero a los 25' Bancarios tiene su posibilidad, la única en todo el complemento, de hacer el del honor cuando Delazzer le pega a la pelota y revienta el travesaño de un Díaz expectante.
Unica y última.
Sotelo vuelve a salvar, esta vez frente a Bacas.
En una contra de 4 contra 2, Zamorano se pierde el cuarto rematando cruzado y desviado.
Y al minuto, iban 37 ya, un golazo premia el buen debut de Matías Collado. Le llega la pelota, la domina, se acomoda y desde fuera del área la clava junto al palo. 4-0 y más que un buen debut para el hermano del Chavo.
Y se acerca el final.
Zamorano vuelve a perderse un gol cantado mandando el remate final sobre el travesaño y en la réplica, luego del saque de arco visitante, vuelve a tomarla Zamorano, echa centro, Bacas que la domina y toca al fondo para meter el quinto.
45 minutos exactos, pitazo del árbitro Taryano (de buena actuación), y en un partido muy correcto se decreta la victoria merecida del Depo por 5-0.
Repetimos, no menospreciamos a Bancarios, si no que simplemente dejamos en claro que el Depo fue, con amplitud, merecedor de la victoria que logró.
El domingo que viene habrá que viajar a Bolívar, para enfrentar a Empleados. Un rival de cuidado en su cancha y que será buena medida para demostrar que el Depo es serio candidato.
Al menos, eso esperamos todos.
Dos secuencias de una misma jugada. Cardone que remata y Zamorano que no llega. La pelota, aunque no lo crean, se fue cerca del palo.
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